Angél en el tren

Angél en el tren
Cris Sousil 20.03.07

Morocha como yo.
Pelo negro y lacio,
cuerpo flaco,
ojos cerrados,
quizás castaños.

Dormida sentada en el piso frío,
apoyada contra la pared
de un asiento rojo,
mientras tanto
tremula el tren
tremulan sueños
tremula su hambre
bajo la ceguera
hombres y andenes.

Yo,
manos atadas,
la miro,
me veo,
en su piel morena,
en su infancia ajena,
me veo de alguna manera
en su cara de ángel,
ángel renegado.

Yo, espíritu sedado,
la miro,
me veo,
y como tantos,
para mi propio espanto,
me callo
(me caigo)
me niego
(me ciego).

Y yo,
yo y mi reflejo,
dormidos en un costado,
como dos ángeles,
ángeles renegados.